Hoy comienza una serie de entrevistas en vídeo a empresarios "pioneros" de la Economía de Comunión que hemos titulado "Destellos de vida y raíces". El protagonista de la primera entrevista es el empresario brasileño Rodolfo Leibholz
¿Cuál es el objetivo del proyecto Flashes of Life & Roots? Si hemos decidido entrevistar a una serie de empresarios que son "pioneros de la EdC", es para recoger las "perlas preciosas" contenidas en las experiencias de aquellas personas que, en distintas partes del mundo y en contextos culturales diferentes, han respondido de forma radical a una vocación común: la de dar vida -con su vida- a la Economía de Comunión.
Las historias de los pioneros son frutos de un mismo árbol, alimentado por las mismas raíces... Conocer sus historias nos permite saborear cuán diferentes pueden ser las expresiones de una misma vida, con formas distintas pero un aroma común. La intención de esta serie de entrevistas es, por tanto, alimentar y animar a quienes, en el presente y en el futuro, se sienten llamados a poner en práctica con su vida la Economía de Comunión. Es decir, frutos que se convierten en semillas para generar nueva vida en sus múltiples expresiones.
El primer protagonista de nuestra serie de entrevistas es Rodolfo Leibholz, brasileño de origen alemán; junto con su hermano Henrique, en 1971 se hizo cargo de la empresa que su padre había fundado en 1966. En su relato surgen las preguntas que se hizo sobre el sentido de su trabajo y las respuestas que se dio a sí mismo a lo largo de su dilatada práctica empresarial.
En 1976, a mi hermano y a mí nos surgió una gran pregunta: ¿qué queríamos de la vida? ¿Queríamos seguir haciendo crecer la empresa dentro de las reglas del capitalismo, que es el sistema vigente aquí en Brasil? ¿Y cómo íbamos a hacerlo? Nos dimos cuenta de que si vendíamos la empresa en aquel momento, ganaría suficiente dinero para él, para mí y para nuestras familias, que ya no tendríamos que trabajar. Así que lo que queríamos era independencia financiera, ¿o había algo más? Luego vinieron varias reflexiones, nacidas en mi opinión de una vocación, de una llamada interior, que llamamos propósito interior, y este propósito interior estaba muy relacionado con la interrupción de una inconsciencia colectiva que veíamos en el mundo.
... Uno se pregunta por qué se producen las guerras. Las guerras ocurren incluso hoy en día debido a una inconsciencia colectiva que siempre existe en el mundo. Así pues, nuestro propósito interno era interrumpir esta inconsciencia colectiva, haciendo de nuestra empresa no sólo un instrumento de producción o generación de bienes, sino un instrumento que provoque consciencia en este mundo económico en el que vivimos - esto es un poco de nuestra historia.