Más de 30 ciudades se han sumado el sábado 28 de agosto a la EoF global march “Las mujeres afganas existen. Together we stand!” lanzada por Economy of Francesco - el movimiento internacional de jóvenes economistas y emprendedores.
Después de que las milicias talibanas tomaran el control de Kabul y de todo el país, el temor ante el futuro, los derechos y la vida, sobre todo de las mujeres y niñas afganas, ha vuelto con fuerza. “Cada mujer en Afganistán se pregunta qué será de su futuro y de su vida: esto no podía ni puede dejarnos indiferentes” – cuentan los promotores de la iniciativa.
Saronno, Trapani, Benevento, Asís, Roma, Arezzo, Parma, Ancona, Río Grande del Sur, Córdoba, Ciudad de Guatemala o Buenos Aires son solo algunas de las ciudades donde los jóvenes, junto con numerosos movimientos y asociaciones ciudadanas – como Libera, Emergency y muchas otras – en muy pocos días han organizado y promovido iniciativas que, el sábado pasado, en una especie de abrazo global, han reunido a miles de personas en las plazas para decir: “Las mujeres afganas existen”. Together we stand! Muchas han sido las convocatorias e iniciativas organizadas en todo el mundo, desde Filipinas a Sudamérica, en países como Argentina, Guatemala o Brasil, a pesar de las difíciles condiciones impuestas por la emergencia del Covid.
Un trozo de tela azul entre las manos, en el pelo, en las muñecas o en las ventanas de casa, como el que quiere esconderlas, quiere expresar que las mujeres afganas no están solas. La participación de comunidades ciudadanas ha sido grande. En silencio, cantando o en compañía de la música, se han leído poesías y testimonios directos y dolorosos que denuncian la condición de las mujeres afganas hoy, condenadas a ver cómo se pisan sus derechos, se rompen los progresos alcanzados durante los últimos 29 años y son reducidas al silencio y la sumisión. Sahraa Karimi – directoria y documentalista afgana – escribe en una carta abierta: A todas las comunidades del mundo. Os escribo con el corazón destrozado y con la esperanza de que podáis uniros a mí en la protección de mi buena gente. […] Sed nuestra voz fuera de Afganistán.
“Repetiremos la marcha todos los sábados – afirman los jóvenes, que ya para el próximo sábado han recogido adhesiones de todo el mundo – mientras sea necesario. En las ventanas de nuestras casas colocaremos, a partir de ahora, un trozo de tela azul para dar voz y visibilidad a las personas en peligro de perderla para siempre. Si una sola mujer afgana consigue saber que en Italia y en todo el mundo hay otras personas, otras mujeres, que se manifiestan por ella, ya no se sentirá sola”.
#AfghanWomenExist
#TogetherWeStand
#AfghanistanIsCalling
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