Saludo de Pascua de la Comisión Internacional EdC
Resucitar es un entrenamiento diario. Lo saben los empresarios que se esfuerzan por resucitar empresas o antiguos oficios desaparecidos. También lo saben los experimentados en la pobreza, que con demasiada frecuencia experimentan tener que resucitar tras una nueva crucifixión.
La vida es toda una escuela de resurrección
También sabemos que uno no puede resucitar solo. Uno necesita al menos a otro, por cuya causa atraviesa la muerte. Por la fuerza de esa necesidad del otro, todo humano-divino, la Vida renace cada día.
Felices Pascuas a todos.
Que podamos ayudarnos mutuamente a renacer de nuevo, cada día, y a resucitar el mundo y la economía, que tanto lo necesitan.
Anouk Grevin e Isaias Hernando en nombre de toda la Comisión Internacional EdC