El pasado 10 de febrero un ataque repentino se llevó a Thomas Hamm, de 63 años, mientras trabajaba: durante años ha sido punto de referencia de la EdC en Alemania.
Hermann Benning
Estos días otro “pionero” de la EdC alemana ha partido repentinamente de esta tierra: Thomas Hamm, Junto con su mujer, Dagmar, ha coordinado durante muchos años con pasión y concreción la red de la EdC en Alemania.
Tenía la característica especial de mantener y cuidar los contactos con muchas personas, prestando especial atención a personas de varios movimientos y a las muchas iniciativas que trabajan en el ámbito de la economía por el bien común. Un ejemplo entre muchos: la participación activa en los congresos de directivos cristianos que desde 1999 se realizan cada dos años en las grandes ciudades de Alemania, a los que asisten miles de personas procedentes también del mundo de la política y las ciencias. Su participación ha sido muy importante para la EdC alemana.
Thomas, nacido en el Sudoeste de Alemania, decidió trasladarse con Dagmar en 1991 – justo después de los comienzos de la EdC – a la ciudadela ecuménica de Ottmaring cerca de Augsburgo y con generosidad se puso a disposición del movimiento de los Focolares. En estos años Thomas supo crear una gran red de relaciones significativas: tuvo un corazón muy abierto, sabía acoger y escuchar en profundidad a las personas que conocía. En la casa de Dagmar y Thomas muchos han podido experimentar una hospitalidad exquisita.
Thomas ha sabido amar superando también momentos de dolor y de adversidad. Estamos seguros de que ahora está en el cielo con muchos otros que, como él, han creído en el amor esperando el alba de un mundo nuevo, sin pobres y sin injusticias. Para los que trabajamos en la EdC ha sido un hermano y un amigo, un instrumento y un verdadero don de Dios.
¡Hasta la vista, Thomas!
