30 años de EdC

Vivir por un mundo más justo, regenerativo y fraterno es una decisión de cada día que afecta a todos los aspectos de nuestra vida cotidiana: el trabajo, el estudio, la familia, la administración de la casa, los logros y las dificultades. Desde Brasil.

 Publicado en en el sitio de Anpecom el 18/08/2021

La Economía de Comunión es un movimiento económico y por consiguiente tiene un impacto directo en los empresarios y sus empresas. Pero la EdC es también un movimiento cultural capaz de proponer a los ciudadanos “nuevas” opciones para una nueva economía que comienza en las casas de nuestras familias y se extiende en las empresas y en las comunidades que nos rodean. Escuchamos los testimonios que Anpecom ha recogido de tres jóvenes familias brasileñas. 

Familia de Ana Paula e Fernando

Para Ana Paula Luna y Fernando Andrade de Recife, vivir la cultura de la Economía de Comunión es un asunto de familia. Nos dicen:

«Nosotros hacemos conscientes a nuestros hijos de la importancia de no ser consumistas y de observar las necesidades de cada persona que trabaja con nosotros, para ofrecer algún servicio o incluso una ayuda económica, porque sentimos que los bienes no son solo nuestros y deben ser compartidos con los demás».

Familia de Fernando Cassiolato y Marina

Una mirada atenta y el cuidado de las finanzas han formado parte de la vida del joven Fernando Cassiolato desde la infancia. «Desde pequeño, mis padres me enseñaron y demostraron la importancia del trabajo y del control de las finanzas familiares. Tres cosas me llamaban la atención a este propósito: me pedían que escribiera mis gastos, me daban la responsabilidad de elegir algunos productos cuando íbamos al mercado y me animaban a dar parte de lo que tenía en la hucha a los necesitados, cosa que hacía a menudo», afirma.

Incluso después del matrimonio con Marina, a pesar de tener unos ingresos bajos, la pareja ha mantenido una mirada atenta a las necesidades de las personas que les rodean. «Los años han pasado y hemos crecido en la vida profesional. Han llegado tres hijos, pero hemos mantenido el mismo estilo de vida. Y junto a los preceptos y a las propuestas de la cultura de la EdC desarrollamos cada día, ya sea como familia o individualmente, esa mirada atenta a los demás. Por eso tratamos de hacer una comunión mensual de bienes con los necesitados y a menudo nos llegan ayudas inesperadas».

Familia de Jomery Nery y Clarisse

Jomery Nery, abogado de Maceió, trata de reducir los efectos de las desigualdades sociales incluso con pequeños gestos. «En mis relaciones personales intento tener una mirada más atenta a los más vulnerables, compartiendo no solo bienes, sino también tiempo, atención, etc. e intento transmitir esta sensibilidad a mis hijos, enseñándoles que los necesidades de los demás deberían ser una medida importante también para nuestras necesidades», añade.

La decisión de comprometerse como ciudadanos por una nueva economía, como demuestran nuestros entrevistados, es la base de la cultura de la Economía de Comunión.

Así es como nos expresamos, también en nuestro manifiesto:

"Creemos que el mundo no necesita más dinero. El mundo necesita personas motivadas para dar lo mejor de sí mismas de modo que los recursos circulen y lleguen a todos, especialmente a los que no tienen voz y permanecen invisibles.

Creemos que la redistribución de la renta comienza por nuestras casas, mediante una nueva relación con los bienes y con las personas. En nuestras comunidades.

Creemos que compartir nuestras vidas, nuestros recursos, nuestro trabajo y todo lo que tenemos y somos genera una pequeña revolución cultural cotidiana. Silenciosa. Una nueva forma de producir y trabajar.

Creemos que una economía basada en las personas produce las mejores decisiones y las mejores estrategias, porque se basa en lo mejor que tiene el mundo: la capacidad de las personas para construir ideas, soluciones, para innovar y resolver los problemas más acuciantes.

Nosotros creemos en la comunión. Y creemos en la Economía de Comunión porque cada día acontece en nuestras vidas y en miles de empresas en todo el mundo".